En todo proceso de planificación del año, llega el momento de ponerle números. Hay que saber qué tan viable es lo que imaginas será tu negocio. Al redactar, pero sobre todo calcular, tu plan de negocios inmobiliario, ves la factibilidad de las metas y estrategias que te has planteado.
En el plan anual del asesor inmobiliario hiciste algunas definiciones importantes, que retomarás en este nuevo documento que son la base para hacer los presupuestos que necesitas tener para levantar tu negocio.
El plan de negocios inmobiliario te sirve para “aterrizar”. Soñar que eres el asesor o la inmobiliaria que logra más cierres de ventas es válido. Pero conseguirlo, significa saber con qué cuentas, qué te hace falta, en qué debes trabajar y qué debes conseguir.
Paso a paso para tener tu plan de negocios inmobiliario
Una mala planificación financiera es una de las principales razones por la que muchos profesionales se alejan de los bienes raíces, cuando es un negocio con enormes oportunidades. Pero para hacerlo bien, hay que determinar el monto en dinero que necesita cada acción dentro de un plan de negocios inmobiliario que oriente tu accionar.
Un plan de negocios es una hoja de ruta. Lo ideal es que se haga una planificación financiera por 3 años. Si logras hacerlo por 5 años, mucho mejor. Al hacer esta estimación, más allá de los imponderables, puedes precisar qué necesitas (capital inicial, cuánto hay que vender o alquilar), para conseguir lo que quieres.
1. Define tu perfil de negocio
Sin duda, saber a qué te dedicarás y cómo lo harás es el comienzo para iniciar tu plan de negocios inmobiliario. Si te ves operando bajo el amparo de alguna franquicia inmobiliaria, necesitarás un capital inicial. También necesitarás ese capital si vas a instalar una oficina en algún punto de tu localidad.
Si te ves operando de forma independiente con un perfil “más digital”, tener presencia en Internet también tiene sus costos, que debes incluir en tu presupuesto anual. En Inmobilia.com tenemos distintos planes de suscripción para fortalecer tu presencia digital. Todo comienza cuando te registras en nuestra web.
La definición de tu perfil de negocio implica, por lo tanto, precisar qué tipo de servicios prestas y con qué tipo de productos inmobiliarios vas a trabajar (inmuebles en venta, compra de inmuebles, alquiler o renta de locales u oficinas, promoción de proyectos en planos o a estrenar, y cualquier otra variable presente en el mercado inmobiliario).
2. Define tu público
Saber a qué tipo de público vas a prestar tus servicios determina acciones que ameritarán una partida dentro de tu presupuesto. Si vas a trabajar para empresarios o ejecutivos que necesitan oficinas triple A, seguramente tendrás una oficina y un personal que tiene un costo e implica un mantenimiento.
Si vas a ofrecer inmuebles del mercado secundario para clase media trabajadora, a lo mejor te concentrarás en tu presencia on line, lo que igualmente tendrá repercusiones en tu presupuesto.
3. Conoce tu mercado
El perfil de tu negocio te ubica en un mercado inmobiliario que debes conocer. Si te dedicas a vender inmuebles en determinada zona de tu ciudad, debes conocer las características de ese mercado. Ello incluye: número de inmuebles, número de operaciones, tipos de inmuebles, tipo de clientes, tendencias, entre otros aspectos.
Ese conocimiento también incluye conocer a tu competencia: cuántas inmobiliarias operan en esa zona, qué tipo de servicios prestan, cuáles ofrecen una propuesta similar a la tuya y en qué te diferencias.
Los gremios son fuentes confiables y una vía para tener acceso a este tipo de información. Igualmente, existen empresas que presentan informes de datos sobre los distintos mercados, tanto de forma gratuita, como pagados.
Otras buenas fuentes de información son los eventos profesionales, sobre todo para determinar entre tus competidores, quiénes pueden ser aliados estratégicos. De nuevo, toda la información que puedas precisar sobre tu mercado, repercutirá en las acciones que necesitas seguir y los recursos que necesitas para financiar esas acciones.
4. Organización o equipo de trabajo
De nuevo, con quién o quienes vas a trabajar tendrá un impacto en tu planificación financiera. ¿Vas a contratar un community manager para que lleve tu presencia en las redes? ¿Vas a contar con los servicios de un fotógrafo profesional para fotografíar cierto tipo de inmuebles? ¿Cuentas con un staff de asesores o personal administrativo que te acompañen?
Al responderte todas estas preguntas, te darás cuenta que habrá pagos fijos mensuales, pagos puntuales por servicios y porcentajes de comisiones.
5. Riesgos y oportunidades
Retoma el análisis FODA que hiciste en el plan anual del asesor inmobiliario. A partir de las amenazas o riesgos que determinaste, trata de precisar qué acciones necesitas ejecutar para abrir nuevas oportunidades. Esas acciones ameritarán luego una partida en el presupuesto.
6. Planificación financiera
Aquí sabrás con mayor certeza cuál es la sostenibilidad de tu negocio. Deberás determinar cuáles son tus egresos e ingresos, para saber cuál es el balance general de tu empresa o emprendimiento, el estado general de ganancias y pérdidas, y el flujo de caja que te permitirá operar con normalidad, entre que inicias hasta que comiences a cobrar tus primeras comisiones por venta o alquiler.
7. Plan de ejecución
Una vez que sabes cuál es la realidad económica, plantéate cómo será la ejecución. En este punto debes precisar mes a mes, qué acciones vas a ejecutar y quiénes son responsables de cada una de ellas dentro de tu organización. Estas acciones, por supuesto, deben estar casadas con tu presupuesto.
Finalmente, llegó el momento de dejar la teoría e ir a la práctica. Descarga el PDF anexo y comienza a trazar tu plan de negocios. Cualquier duda, déjanos tus preguntas en la sección de comentarios. Estamos para ayudarte.
