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La decoración con estilo nórdico obviamente se inspira en los países escandinavos. Aunque se gestó a principios del siglo XX, desde hace una década está en el tope de las preferencias en materia de interiorismo.

Los largos inviernos de los países del norte de Europa inspiraron a los decoradores que anhelaban atrapar la luz del sol que escaseaba. Así que crearon un estilo muy limpio y práctico, donde domina el color blanco, los colores pasteles y las líneas rectas.

Si quieres apostar por una decoración con estilo nórdico en cualquier espacio de tu hogar, aquí te dejamos los tips para lograr esta tendencia que tiene mucho en común con el minimalismo, pero mucho más acogedora y cálida.

 

5 elementos infaltables en una decoración con estilo nórdico 

1. ¡Que brille el blanco! 

La nieve inspira a la decoración escandinava, como también se le conoce. Paredes, pisos, techos y mobiliario en un pulcro blanco aportan la esencia de esta tendencia. El negro, como color secundario, aporta más intensidad a la predominante blancura.  

2. Los detalles en tonos pasteles 

La preferencia por el blanco admite la incorporación elementos en tonos claros o pasteles. Si quieres una decoración con estilo nórdico en las habitaciones de los niños, incorpora estos tonos en paredes, cojines y lencería.

   

3. Directo de la naturaleza 

Fibras y materiales naturales son clave en la decoración con estilo nórdico. Alfombras y tapizados deben ser en lana, lino o algodón, mientras que los muebles o pisos deben ser en maderas claras al natural y el toque final: cojines en piel.   

4. Hecho a mano y reciclaje 

¡Los nórdicos aman el reciclaje! Así que son muchos los elementos hechos a mano o reciclados que pueden formar parte de la decoración con estilo nórdico. Las mantas en crochet, las cajas de madera recicladas en tonos pasteles, los cojines con distintas texturas, aportan ese toque cálido y hogareño que posee esta tendencia.

 5. Motivos geométricos y formas sencillas 

En la decoración escandinava predominan las líneas rectas y la sencillez de las formas geométricas. El mobiliario y demás elementos decorativos deben presentar estas características. Es importante no sobrecargar los espacios, para que cada elemento destaque sobre el limpio blanco.

Este estilo se puede combinar bien con otras tendencias como el vintage o el estilo industrial, precisamente por la sencillez y practicidad de los diseños. Si tienes grandes ventanales no uses cortinas pesadas. Y si tienes muebles de diseño de los años 50, se verán geniales en tu salón nórdico.

Fuentes: revistainteriores.es / elmueble.com 

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