Todo el que vive en una ciudad, sea grande o pequeña, tiene vecinos. Es posible tener buenas relaciones con los vecinos más allá de las diferencias que los puedan separar.
Por supuesto, hay todo tipo de vecinos. Los que no dudarán en responder un saludo cada mañana y respetarán las normas de convivencia, y los que no. Amables o antipáticos, cordiales o groseros, hay de todo.
Como toda relación entre seres humanos, habrá momentos en que puedan surgir situaciones tirantes. Incluso entre los vecinos con lazos más estrechos. Sin embargo, antes de que se generen conflictos, siempre será mejor prevenirlos.
¿Por qué tener buenas relaciones con los vecinos?
Si vives un apartamento o en una casa dentro de un urbanismo tienes vecinos. Las buenas relaciones con los vecinos de un edificio quizás sean más complejas que cuando solo tienes una casa de un lado y otra del otro lado.
Sin embargo, entre vecinos pueden surgir grandes vínculos. Un buen vecino puede ser la primera persona que llames en un caso de emergencia en tu hogar, mucho antes que otros familiares o amigos que vivan más lejos.
Entonces, lo ideal es mantener buenas relaciones con los vecinos, que garanticen una convivencia grata y les permita brindar una atención temprana y oportuna de los problemas comunes que les afecten.
Cómo cultivar buenas relaciones con los vecinos
1. Cordialidad ante todo
Dar los buenos días o las buenas tardes al encontrarse con un vecino es el comienzo de toda buena relación. Un saludo cordial nunca sobra, siempre es bien recibido y evita sembrar resquemores innecesarios. Incluso en caso de conflictos, es importante que prive la cordialidad y el respeto.
2. Respeta la privacidad
Más allá de que puedas cultivar una amistad más profunda o de ser amable, evita invadir la privacidad de tus vecinos. Evita las reuniones en pasillos para hablar de un vecino o inmiscuirse en su vivienda.
3. Participa en las reuniones de la comunidad
Es fácil quejarse de los problemas, pero si no asistes a las reuniones de la junta de condominio o de tu comunidad ¿cómo te vas a enterar de cuáles son las decisiones que deben tomar en conjunto para aportar soluciones a los problemas que les aquejan?
4. Respeta las normas
Si vas a hacer una remodelación o mudanza es importante respetar los horarios y las normas establecidas para ello. Cuida que los espacios comunes estén limpios y libres a la mayor brevedad posible.
5. Cuidado con las mascotas
Las mascotas son parte de la familia, pero también pueden resultar molestos para vecinos poco amantes de los animales. Cuida que tus mascotas, sobre todo el ruido que hacen y donde dejan sus excrementos, no enturbien las buenas relaciones con los vecinos.
6. Ni ruidos molestos ni luces
Una celebración familiar o entre amigos muy estridente puede perturbar a tus vecinos más cercanos. En los edificios hay normas al respecto que hay que cumplir. Pero vivir en una casa no te exime de ponerle límite a la hora d celebrar.
Igual hay que prestar atención a las luces exteriores de tu vivienda, si perturban el sueño de tus vecinos, tienes que hacer algo.
7. Presta atención a tus plantas
Tener un lindo jardín es muy grato y reconfortante. Pero si las ramas o las hojas de tus árboles o arbustos afectan la propiedad de tu vecino se convierten en un problema. Es mejor no escatimar en los cuidados que debes dar a tu jardín, tanto por la paz que te trasmite, como para evitar incomodidades con tus vecinos.
No es tan difícil
Tener buenas relaciones con los vecinos no es tan difícil. Con buena disposición, amabilidad y respeto es posible fraguar el ambiente armónico y la sana convivencia que necesitan para resolver los problemas comunes que seguramente afectarán a tu comunidad.
